El Museo Bode, inaugurado en 1904 bajo el nombre de Kaiser-Friedrich-Museum, en honor al emperador Federico III de Alemania, recibió su actual nombre en 1956, dedicado a su primer director, conocido por sus creativas exposiciones, en las que mezclaba piezas y periodos históricos con el objetivo de crear exposiciones únicas con temáticas propias.
El edificio fue diseñado por Ernst von Ihne y tiene la apariencia de una estructura que emerge directamente desde el río Spree. El edificio fue severamente dañado durante la guerra y pasaron muchos años hasta que el edificio y su cúpula recuperaron su estado anterior. En 1997, se inició una profunda renovación del edificio que continuó hasta bien entrado el nuevo milenio.
Hoy en día, la colección de esculturas del museo alberga grandes obras de arte oriental cristiano, esculturas y piezas de la Edad Media, arte del gótico italiano y objetos del primer período del Renacimiento, entre muchas otras épocas históricas.
La colección numismática abrió sus puertas al público en 2004, en el centenario de la inauguración del museo, y se ha convertido hoy en día en una de las colecciones de monedas más grandes y conocidas del mundo.