Tu recorrido a pie por las ruinas de Cobá comienza, como es lógico, en la entrada del lugar. Cuando entres y eches un primer vistazo al lugar, escucharás la historia de cómo surgió y cayó esta civilización sorprendentemente avanzada. También conocerás algunos datos poco conocidos sobre los árboles únicos que se encuentran en estas ruinas y la importancia que tenían en la antigua sociedad maya.
El primer punto de referencia importante que encontrará es un campo de juego de pelota. A diferencia de otros sitios, es probable que este se utilizara con fines ceremoniales, para representar una lucha entre la oscuridad y la luz. ¡Algo muy en juego para un juego de pelota!
Será difícil pasar por alto la siguiente parada: la Pirámide de La Iglesia. Si miras con atención, es posible que veas algunos residuos de la pintura que alguna vez cubrió toda esta pirámide. Un poco más adelante en el camino se encuentra la Pirámide de la Encrucijada, un ejemplo de una versión inusual de la arquitectura maya habitual.
Mientras caminas, notarás la red sorprendentemente intacta de caminos antiguos que atraviesan el sitio. Estos caminos fueron de gran importancia para las ciudades mayas y tienen mucho que decir sobre la vida hace más de mil años.
También verás muchas piedras grandes y rectangulares con diseños, llamadas estelas. Mientras caminas, escucharás todo acerca de su significado y por qué los mayas las crearon en primer lugar.
El siguiente punto de interés importante es la Pirámide del Dintel Pintado. Esta impresionante estructura de piedra caliza estuvo pintada en su día con colores brillantes y aún se pueden encontrar rastros de esos colores si se sabe dónde buscar.
Al pasar por la segunda cancha de pelota, que se utilizaba para el juego de una manera más tradicional que la primera, aprenderá todo sobre las creencias y prácticas religiosas de los antiguos mayas, así como el infame calendario con el que registraban el paso de los años.
Finalmente, te encontrarás al pie de la pirámide Nohoch Mul, la segunda pirámide maya más grande del mundo. Pero, ¿qué mejor que admirar una pirámide como esta desde abajo? ¡Sube a la cima! Sube los 120 escalones y contempla las ruinas de Cobá desde una perspectiva completamente nueva.