Si sueña con lagos cristalinos, montañas imponentes y paisajes de cuento de hadas, únase a esta escapada alpina de un día y descubra dos de los tesoros más mágicos de Eslovenia, el lago Bled y el lago Bohinj, en un viaje inolvidable.
Su aventura comienza en el mundialmente famoso lago Bled, una postal hecha realidad. Imagínese sus aguas esmeralda, una pequeña isla coronada por una iglesia de cuento y la legendaria campana de los deseos, de la que se dice que le concederá lo que desea si la toca tres veces. Para disfrutar de las mejores vistas, diríjase al castillo de Bled, encaramado sobre un acantilado, donde el lago brilla bajo sus pies.
Desde aquí, la carretera se adentra en los Alpes Julianos hasta la serena belleza del lago Bohinj, enclavado en el Parque Nacional de Triglav. El mayor lago natural de Eslovenia está enmarcado por escarpados picos, con el poderoso monte Triglav reflejado a menudo en su superficie vidriosa. Las leyendas hablan incluso de Zlatorog, el ciervo de cuernos dorados, que antaño vagaba por estas laderas salvajes.
Un corto y refrescante paseo le llevará hasta la cascada de Savica, una espectacular caída de 78 metros que se precipita en un estanque esmeralda. Sienta la fresca bruma alpina en la cara mientras el rugido del agua resuena en el bosque: el broche de oro a un día en el país de las maravillas de la naturaleza.
Ya sea el romanticismo de Bled o la belleza indómita de Bohinj, este recorrido captura el alma alpina de Eslovenia en un solo día.