Descubre uno de los monumentos más importantes de la ciudad: Santa Maria delle Grazie, una basílica del siglo XV situada en el corazón de Milán
La baslica es mundialmente conocida especialmente por ser el hogar de La última cena, la pintura icónica de Leonardo da Vinci. En un principio, la basílica fue construida por orden de Francesco I Sforza, y fue terminada en 1497 ya petición de Ludovico il Moro, destinada a convertirse en el mausoleo de la familia Sforza. Hoy en día, Santa Maria delle Grazie es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y uno de los mejores ejemplos de arquitectura renacentista y gótica de Milán.
Tu guía te revelará las historias y anécdotas durante la visita guiada, mientras admiras el encantador interior de la basílica, tan intrincadamente diseñado por Bramante y Solari.