El recorrido comienza en el centro de la ciudad (geográfica y socialmente), en el famoso Duomo de Milán. Esta increíble catedral a menudo se describe como una de las iglesias más bellas del mundo. En su libro «Inocentes en el extranjero», Mark Twain le dedicó un capítulo propio, en el que decía «¡Tan grandiosa, tan solemne, tan vasta! ¡Y, sin embargo, tan delicada, tan aireada, tan elegante!». Gracias a tus entradas sin colas para el Duomo, no perderás tiempo en la cola y entrarás directamente para disfrutar de una visita guiada de este majestuoso espacio.
La próxima parada es la impresionante Galleria Vittorio Emanuele II, una galería comercial abovedada de vidrio del siglo XIX. Repleta de tiendas y cafeterías de moda, a menudo se la llama el salón de Milán por su importancia como punto de encuentro. Al pasar por la galería, llegarás a la Piazza della Scala, la plaza que alberga el mundialmente famoso teatro La Scala, la Ópera de Milán desde 1778, aún en funcionamiento. Algunos de los mejores músicos y cantantes de la historia han actuado aquí, especialmente Giuseppe Verdi, cuyas famosas óperas, como Falstaff, con frecuencia se estrenaban en este mismo teatro.
Luego, pasarás por el distrito de Brera. Lleno de edificios históricos, cafés literarios, restaurantes y bares de moda, esta área ha sido durante mucho tiempo el hogar de artistas e intelectuales. Desde aquí, pintorescas y sinuosas calles te llevarán hacia el norte hasta el castillo Sforzesco. Este imponente castillo medieval y fortaleza, fue sede y residencia de la familia gobernante de Milán y ahora alberga varios de los museos y colecciones de arte de la ciudad.
Como guinda de la experiencia, te espera la atracción más famosa de Milán, La última cena de Leonardo Da Vinci. Escondida en la iglesia de Santa Maria delle Grazie, esta obra maestra atrae a grandes multitudes, lo que conlleva unas largas colas de acceso general que a menudo se prolongan durante horas. Gracias tu acceso sin colas con un horario reservado con antelación, entrarás directamente y pasarás 15 minutos a solas con esta obra maestra, junto con tu grupo de solo 25 personas o menos y tu guía.
Y ahí lo tienes. En solo tres horas, habrás visto los lugares más destacados de Milán y te habrás familiarizado con la historia de la ciudad y las anécdotas de cada atracción. Con tu entrada sin colas, evitarás largas esperas y podrás aprovechar al máximo tu tiempo.