Si quieres vivir un momento de eternidad, entre el cielo y el mar, visita el precioso Monte Saint-Michel. Ven y descubre esta maravilla del mundo occidental, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Te entregarán una guía con toda la información práctica que necesitarás, para que puedas visitar la famosa abadía gótica a tu propio ritmo, pasear por el pueblo y subir sus estrechas calles hasta encontrar las mejores vistas de la bahía.
Visitarás la base de la isla del Monte Saint-Michel a pie. Es un afloramiento rocoso fortificado único, que se remonta a la Edad Media y que está rodeado por una gran bahía con una de las mareas más grandes de Europa. Subirás hasta lo más alto de la isla, hasta su fascinante abadía benedictina, que data del siglo VIII. Es un maravilloso ejemplo de la arquitectura gótica de tres pisos. Verás el claustro, el imponente refectorio y el bonito jardín de la abadía, con vistas al mar.
Aprovecha al máximo tu tiempo en la abadía con un paseo por las murallas. El paisaje te dejará boquiabierto mientras respiras el aire del mar. La arena se extiende hasta donde alcanza la vista durante la marea baja, pero cuando sube, la isla desaparece tras el mar. También puedes visitar los museos del Monte Saint-Michel, comprar algunos recuerdos, contemplar el ajetreo y el bullicio de la vida en el pueblo o probar las crepes locales. Al final de la experiencia, te llevarán de vuelta a París.